Elegir el frigorífico adecuado no solo depende del diseño o la marca, sino también de su capacidad de almacenamiento. Muchas veces, los usuarios compran un modelo demasiado grande —lo que aumenta el consumo eléctrico y desperdicia espacio— o uno demasiado pequeño, que termina resultando incómodo por falta de sitio para los alimentos. En este artículo te explicamos cuántos litros necesita un frigorífico para 1 o 2 personas, qué factores influyen en la elección y qué características adicionales conviene tener en cuenta para hacer una compra inteligente y duradera.
La capacidad de un frigorífico se mide en litros útiles, es decir, el espacio real disponible para almacenar alimentos y bebidas. Esta cifra suele dividirse en dos partes: la del refrigerador (zona de frío positivo) y la del congelador (frío negativo). Por ejemplo, un modelo de 200 L puede tener 150 L en el compartimento del frigorífico y 50 L en el congelador. Esta información suele aparecer en la etiqueta energética o en las especificaciones del fabricante. No hay una medida estándar válida para todos, ya que la capacidad ideal depende del número de personas, los hábitos de compra, el tipo de alimentación y el espacio disponible en la cocina.
De forma general, se recomienda calcular entre 100 y 150 litros de capacidad por persona. Por lo tanto:
Si además cocinas con frecuencia o haces compras semanales grandes, puede convenirte un modelo un poco más amplio, de hasta 350 L. En cambio, si sueles comer fuera o haces compras diarias, uno compacto de 200 L será suficiente.
Dependiendo del espacio disponible que tenga en su cocina y del estilo de vida, hay varios tipos de frigoríficos y de marcas que se adaptan a hogares pequeños:
Tienen una altura de unos 85 cm y una capacidad de 90 a 140 L. Son perfectos para estudios, apartamentos o segundas residencias. Algunos incluyen un pequeño congelador superior.
Ventajas: tamaño compacto, bajo consumo y fácil instalación.
Inconvenientes: poca capacidad y limitaciones en la conservación de alimentos congelados.

Combinan un refrigerador y un congelador separados, con capacidad total de entre 200 y 300 L. Son la opción más equilibrada para parejas o personas que cocinan con frecuencia.
Ventajas: organización del espacio, diseño moderno y buena eficiencia energética.
Inconvenientes: mayor altura (hasta 2 m) y precio algo superior.

Ofrecen más espacio útil de refrigeración (entre 150 y 250 L) y pueden complementarse con un congelador independiente.
Ventajas: más capacidad para alimentos frescos, ideales si se compra a diario.
Inconvenientes: no incluyen congelador, por lo que puede ser necesario adquirir uno aparte.

No solo importa cuántas personas vivan en casa, sino cómo utilizan el frigorífico. Aquí algunos ejemplos prácticos:
También debes considerar si necesitas espacio extra para recipientes grandes, botellas o tápers, y si prefieres estantes de cristal o rejilla.
Un frigorífico representa entre el 25 % y el 30 % del consumo eléctrico total de un hogar, por lo que elegir un modelo eficiente puede reducir la factura de luz de forma significativa.
Busca siempre etiquetas A++ o A+++ (o en la nueva escala europea, A o B). Los modelos modernos con tecnología Inverter ajustan la potencia del compresor y consumen menos energía, al tiempo que ofrecen mayor estabilidad térmica.
Un frigorífico de 200-300 L con buena eficiencia puede consumir entre 120 y 180 kWh al año, mientras que uno antiguo puede superar fácilmente los 300 kWh.
Además, mantener el frigorífico a una temperatura correcta (entre 3 °C y 5 °C) y limpiar las rejillas traseras regularmente ayuda a optimizar el rendimiento energético.
Para 1-2 personas, la distribución del espacio es casi tan importante como la capacidad total. Un frigorífico bien organizado facilita el acceso a los alimentos y evita desperdicios.
Busca modelos con:
Si el espacio de tu cocina es reducido, opta por un modelo con puerta reversible o incluso uno integrable que se camufle en el mobiliario.
Un frigorífico pequeño, bien cuidado, puede durar más de 10 años sin problemas. Aquí algunas recomendaciones prácticas:
Estos pequeños cuidados ayudan a mantener la eficiencia energética y evitan averías comunes.
Algunas marcas ofrecen modelos especialmente diseñados para hogares de 1-2 personas, con una excelente relación calidad-precio:
Elegir una marca reconocida garantiza la disponibilidad de repuestos y un servicio técnico confiable en caso de avería.
Para una o dos personas, el frigorífico ideal debe tener entre 200 y 300 litros de capacidad total, ser eficiente energéticamente y adaptarse al espacio disponible. Los modelos combi pequeños o de una puerta con congelador separado son los más prácticos y versátiles.
Recuerda que la elección correcta depende de tus hábitos de compra y cocina: si haces compras pequeñas y frecuentes, bastará con un modelo compacto; si prefieres almacenar y congelar alimentos, busca uno con mayor capacidad y buen compartimento freezer.
Invertir en un frigorífico adecuado no solo te ahorrará dinero en electricidad, sino que también te brindará comodidad, orden y durabilidad. Y si en algún momento notas fallos o pérdida de frío, no dudes en contactar con un servicio técnico especializado en frigorifico para alargar su vida útil y mantenerlo en perfecto estado.